martes, 3 de julio de 2007

AGUILA IMPERIAL Aquila heliaca adalberti





CARACTERÍSTICAS

Algo más pequeña que la real, aunque parece más robusta y compacta. Los adultos resultan inconfundibles por las manchas blancas en los hombros y en la nuca que destacan sobre el plumaje general, casi negruzco. Carece de manchas blancas en la cola. Tiene el pico muy fuerte y negro que brilla con reflejos metálicos, las garras son más cortas y robustas que las de su congénere. Las hembras son algo mayores que los machos.
El aspecto general del plumaje del águila imperial varía con la edad: de un pardo leonado claro sin manchas apreciables ( característico de la primera edad), pasa a un intermedio más oscuro, hasta alcanzar, a partir del cuarto año, el tono achocolatado, con grandes manchas blancas, que caracteriza a los individuos adultos.
Potencia de arrastre: Aunque generalmente se estima que estas grandes águilas pueden transportar solo pesos que no superen el propio, se ha podido comprobar que en ocasiones ha llevado hasta sus nidos presas mucho más pesadas que ellas mismas, seguramente en un planeo a favor de la pendiente.
Picos: Fuertes, afilados y ganchudos, sus picos son auténticos sacabocados que rematan a las presas, desgarran las más duras pieles e incluso parten los huesos.
Vista: Se ha calculado que la potencia visual de un águila puede equivaler a la humana provista de prismáticos de diez aumentos. Esta potencia óptica les permite descubrir presas a mucha distancia.
Alas veleras: Anchas y muy largas, los planos de sustentación de estas grandes águilas permiten largas estancias en el aire. Así, suspendida por las corrientes térmicas, estas aves pueden desplazarse sin consumir energías.
Escotadura: En las rémiges de las grandes águilas puede apreciarse una profunda escotadura, es decir, les falta una porción de pluma, en uno de los lados. Estos huecos pueden representar hasta un 40 % de la superficie del ala extendida y cumple un papel ralentizador del vuelo.
Garras: Las garras, muy curvadas y extraordinariamente largas, son un arma de gran eficacia que no solo atrapa a las presas sino que les da muerte con celeridad, por la gran presión que son capaces de desarrollar.

HÁBITAT:

Sus hábitat idóneos son las áreas de bosque escleròfilo típicamente mediterráneo, donde se entremezclan los matorrales, los pastizales y los riachuelos. Está presente sobre todo en las campiñas bajas del centro y sur de la Península Ibérica.
Los ejemplares más jóvenes pueden ser capturados por otras aves rapaces y por zorros. El alarmante descenso de su población se debe, no obstante, a causas exclusivamente humanas: caza ilegal, electrocución, transformación de zonas forestales en regadíos, empleo exagerado de pesticidas, etc.
A pesar de ser un ave numerosa durante la primera guerra mundial del siglo XIX, actualmente el número de parejas reproductoras apenas supera la centena.
Territorios:
Ser visto y oído por los congéneres también resulta de mayor importancia para los grandes cazadores alados, pues es la única manera de patentizar que un territorio tiene ya dueño.
Las manchas alares y occipitales de las águilas adultas actúan como auténticos semáforos que emiten destellos captables a gran distancia.
Las manifestaciones sonoras no son frecuentes, pero son bien audibles hasta dos km de distancia y pueden avisa perfectamente al intruso de que ha penetrado en territorio ocupado.
Las grandes águilas precisan cazaderos enormes, aunque el territorio propiamente dicho (es decir, el que defienden a ultranza frente a sus congéneres) queda reducido a un pequeño espacio de unas 500 Ha alrededor del nido.
En función de la riqueza en caza de los territorios, las Águilas Reales e Imperiales, pueden compartirlos. Se ha observado que no hay competencia entre el Águila Real y la Imperial.

Técnicas para detectar águilas:
Posaderos: Son lugares resguardados de los vientos dominantes, siempre en árboles cercanos a claros del bosque.
Restos: Aunque dependen de lo aprovechable de cada presa (de los reptiles., por ejemplo, no suele quedar nada) es frecuentes encontrar conejos medio comidos y junto a ellos, hilachos de piel que las rapaces han arrancado con el pico.
Egagrópilas: Las regurgitaciones de nuestras grandes águilas son prácticamente indiferenciables entre sí. Su gran tamaño (hasta 8 cm) permite diferenciarlas de otras rapaces diurnas. Pueden aparecer muy desmenuzadas.
Localización visual en vuelo. Como la mayoría de las grandes rapaces permanecen mudas durante gran parte del año y el mejor sistema de localización es la observación directa. La considerable envergadura de sus alas favorece dicha localización. Es aconsejable recorrer el interior los valles para descubrirlas desde abajo, pues así resultan mucho más visibles.
Para realizar las prospecciones es preferible utilizar las primeras horas del día.

ALIMENTACIÓN:

Se alimentan, generalmente de lagomorfos (conejos y liebres), roedores (ratones, marmotas susliks y hamsters principalmente) y aves de tamaño medio (palomas, perdices, chovas, gansos, gallinetas, fochas) cuyo vuelo de huida y movilidad es siempre más lento que el de los pájaros pequeños. Es característica distintiva de las dietas españolas la presencia de reptiles, generalmente ausentes en las europeas.
En comparación con el Águila Real, sus garras son más débiles, dedicándose a la caza de animales menores, a los que ataca casi siempre en el suelo. Algunas veces sale la pareja a cazar; mientras uno levanta la presa el otro la captura.
Papel ecológico: es el superpredador de nuestros bosques. Puede decirse que , en las comunidades de bosque mediterráneo, ocupa la cúspide de la cadena alimentaría. Aunque raramente actúa como carroñero, la rarefacción del conejo le ha obligado a cambiar su dieta, que cada vez incluye más animales domésticos hasta carroña.
Técnicas de caza: el acecho es la táctica común a la mayoría de la s aves rapaces. Inmóviles en su posadero, permiten que sus presas se alejen de sus refugios naturales, y a favor de la gran aceleración de que son capaces de adquirir sorprenden en los claros del bosque a conejos y perdices.
La trayectoria del Águila imperial, tras sus vuelos prospectores, resulta mucho más vertical que la del Águila Real. Prácticamente cae en barrena.
El biotipo forestal impone una mayor capacidad de maniobra al Águila Imperial que, con frecuencia, pica directamente sobre los claros del bosque para sorprender en ellos a sus presas.
Acción combinada para cazar: En ocasiones, las águilas imperiales cazan en equipo presas de gran tamaño, como los gansos. La técnica resulta muy elaborada por la enorme dificultad que entraña abatir algo que pesa tanto como arma ellas mismas y, sobre todo, que cuenta con el gregarismo con arma defensiva. Unas de las componentes de la pareja ojea y levanta a los gansos para que la otra, que vuela a gran altura, pueda picar velozmente sobre las asustadas anátidas y dispersarlas. Entonces, la primera selecciona y ataca a aquel ganso que haya quedado aislado en la maniobra de dispersión.

REPRODUCCIÓN:

Son amantes de su territorio, en el que disponen de varios nidos utilizados en rotación. A principios del año comienza su llamativo cortejo, de manera que hacia marzo ya están las parejas consolidadas. Es en esta época, durante la reproducción, cuando mas sensible es el águila imperial a la presencia humana. Incluso puede abandonar la puesta si es molestada y nidificar de nuevo en un lugar más tranquilo.
Los 2 o 3 polluelos salen del cascaron a principios de Junio, después de una incubación de 43 días . con 25 días tiene ya el plumaje completo, y con 6 meses vuelan ya, regresando las primeras veces al nido para dormir.
Al contrario de lo que ocurre con las águilas reales, los dos polluelos suelen llegar a adultos, excepcionalmente incluso 3, aunque en épocas de escasez también practican el cainismo.
Cuando los progenitores deben abandonar el nido, cubren los polluelos o los huevos con ramitas verdes.
Al transcurrir los meses los pollos se alejan del nido, siendo todavía vigilados por los padres. Esta tutela se aminora, llegando a transformarse en un comportamiento agresivo, que obliga a los jóvenes a dispersarse. Volverán a los 3 o 4 años, convertidos en adultos, para criar cerca de la zona donde nacieron.
No alcanzan el plumaje de las águilas Imperiales adultas hasta los 6 años de edad.
Paradas nupciales: se basan en largos y sostenidos vuelos de la pareja que recorre así todo su territorio. Volatines y cabriolas aéreas con entrechocado de garras.
El marcaje del nido y su área lo realiza el macho con sus reclamos y vuelos de intimidación.
Nidos: El águila imperial anida siempre en árboles. Utiliza para ello las copas y las ramas terminales que permiten el aterrizaje de un ave tan grande. Las especies más comunes de árboles utilizados son: encina, alcornoque , eucalipto, sauce, pino silvestre y pino piñonero.
Huevos:
Numero normal: 2
Incubación: 42/44 días
Pollos en nidos: 63/70 días

Pollos: se ha observado un fenómeno de autentico control de las poblaciones, a través de la competencia alimentaria entre los pollos, sobre todo cuando el águila Imperial pone 4 o 5 huevos. El menor de ellos nacerá hasta 14 días más tarde que el mayor, su cabeza quedará muy lejos de la sus hermanos. En la competencia por el sustento. Los hermanos mayores accederán, gracias a su mayor corpulencia, a las más importantes cantidades de alimentos, consecuentemente, en épocas de escasez, el pollo benjamín morirá de inanición.

jueves, 26 de abril de 2007

TOPILLO Microtus duodecimcostatus


CARACTERISTICAS

Especie claramente diferenciable de otros micromamíferos, como musarañas, lirones o ratones, por su hocico corto y redondeado, sus ojos y orejas reducidos (estas últimas tapadas parcialmente, además, por el pelo), su cuerpo cilíndrico, sus extremidades pequeñas y su cola de escasa longitud. El pelaje, suave y denso, presenta una coloración grisácea-pardusca con tonalidades amarillentas en su dorso, mientras en la región ventral luce un gris plateado pálido.

HÁBITAT

Elige, para la óptima excavación de sus galerías, los suelos más blandos y húmedos de las praderas, áreas boscosas abiertas, aledaños de los ríos y cultivos de regadío.

ALIMENTACIÓN

Se alimenta fundamentalmente de semillas y frutos de árboles, rizomas, bulbos, tubérculos í, granos de cereal, etc., llegando a consumir también pequeños invertebrados

REPRODUCCIÓN

La hembra de topillo llega a tener de dos a tres partos anuales con una media de dos a cuatro crías en cada uno de ellos. Su nido consiste en una cámara subterránea forrada de vegetación herbácea.

CURIOSIDADES

Por su actividad crepuscular y nocturna, así como por su vida hipogea, es uno de nuestros roedores más difícilmente observables. No obstante, son fáciles de detectar, ya que los escombros o tierra resultante de realizar sus largos pasillos subterráneos son depositados en la superficie en forma de visibles montículos.

El topillo común permanece activo durante todo el año.

MUSARAÑITA Suncus etruscus


CARACTERÍSTICAS

Se trata, sin duda alguna, del mamífero más pequeño de toda Europa, siendo su reducidísimo tamaño, por tanto, la característica más notoria a la hora de identificarle. Destacan su hocico alargado con abundantes pelos táctiles, sus ojos diminutos, orejas bien desarrolladas con unos característicos pliegues, extremidades cortas, y su cola, de la mitad de longitud aproximadamente que cabeza y cuerpo juntos. La coloración del dorso es grisácea difuminándose por los costados hasta alcanzar tonalidades más claras en la región ventral.

HABITAT

Habita preferentemente en los bosques de encinas y alcornoques, prados, márgenes de cultivos, granjas y jardines

ALIMENTACIÓN

Se alimenta de variedad de invertebrados como arañas, miriápodos (ciempiés, milpiés). coleópteros (escarabajos), ortópteros (saltamontes, grillos), mantis religiosas. etc., llegando también a consumir crías de pequeños vertebrados (ratones), lagartijas y lagartos jóvenes.

REPRODUCCIÓN

Su ciclo reproductivo es muy similar al de la musaraña común, llegando a tener varios partos a lo largo del periodo comprendido entre el principio de la primavera y el otoño. El número de crías por camada oscila entre cuatro y seis, alcanzando éstas a las tres semanas de vida aproximadamente el tamaño y aspecto de sus progenitores.

CURIOSIDADES

Su actividad crepuscular y nocturna, unida a sus menudas dimensiones y recatadas costumbres, hacen de la musarañita una de las especies de nuestra fauna más desconocida. Desarrolla, no obstante, una intensa actividad debido a su acelerado metabolismo, que la obliga a buscar continuamente alimento. Su descomedida agresividad queda patente en el momento que es capaz de enfrentarse y dar muerte en muchas ocasiones a presas que la superan en tamaño y peso.
Se refugia bajo troncos caídos o entre las grietas de los muros de piedra que se encuentran en las lindes de los caminos, construyendo también su nido entre los matorrales a base de vegetación herbácea.

MUSARAÑA COMUN Crocidura russula



CARACTERÍSTICAS

La musaraña es un mamífero que pertenece al orden de los insectívoros, aunque en su alimentación también suelen entrar pequeños invertebrados.

Su hocico tiene una prolongación de forma puntiaguda y los ojos son pequeños, su pelaje es corto, muy denso y aterciopelado. Las orejas sobresalen claramente del pelaje. La cola es tan larga como la mitad de la longitud de la cabeza mas el cuerpo y tiene una serie de pelos largos, distribuidos irregularmente, los cuales sobresalen del resto.

El color de su espalda puede ser gris amarronado, pardo o pardo rojizo, y por los costados el color se va degradando hasta llegar al vientre que es color gris. Los jóvenes son completamente grises y los adultos durante el invierno se vuelven más grisáceos y oscuros. La musaraña común mide entre 5,4 y 8,45 cm, a lo que hay que añadir su cola que varía entre los 2,8 y los 5 cm. Su peso puede ir desde los 4,7 hasta los 12 gr.

Posee un total de 28 piezas dentales totalmente blancas, presentando en la mandíbula superior 6 incisivos, 2 colmillos, 2 premolares y 6 muelas, y en la mandíbula inferior, 4 incisivos menos que en la superior.

Este animal puede vivir en cautividad hasta 4 años, pero lo normal es que su vida finalice a los 2 o 2 años y medio.

HÁBITAT
Se adapta a vivir desde el nivel del mar hasta por lo menos los 2.000 metros de altura.

Habita en zonas de matorral, linderos de bosques (encinar, alcornocal, robledal), prados, márgenes de campos de cultivo, jardines y granjas.

Inicia su actividad en el crepúsculo y la desarrolla durante toda la noche, siendo un mamífero de costumbres recatadas y difícil de observar, pero muy abundante. Es característico su acelerado metabolismo, que la obliga a estar en continuo movimiento buscando alimento.

Ubica su guarida bajo troncos caídos, en oquedades construidas por otras especies o entre la vegetación, donde construye una estructura redondeada a base de material herbáceo. Permanece activa también durante el invierno.

ALIMENTACIÓN

Tiene un régimen alimenticio fundamentalmente insectívoro, alimentándose de grillos, saltamontes, mantis religiosas y orugas, llegando a capturar también arañas, caracoles, lombrices, lagartijas e incluso a consumir. Ocasionalmente
carroña. Entre los numerosos predadores con que cuenta destacan la lechuza y el cárabo común, la comadreja y el zorro, así como las culebras bastarda y de escalera.

REPRODUCCIÓN:

El periodo de reproducción suele darse en los meses de febrero y septiembre.

La gestación tiene una duración aproximada de entre 27 y 33 días, normalmente menos de 30, y tras ese periodo se produce unos de los 3 o 4 partos anuales en el que pueden nacer entre 2 y 10 crías, siendo más frecuente que nazcan 3 o 4 por camada. Las crías pesan al nacer unos 0,8 y 0,9 gramos. A partir de la semana ya se les puede observar el comportamiento típico de la caravana, en el que se trasladan de un lugar a otro en fila india, sujetándose unos a otros por la base de la cola, formando así una especie de tren o caravana, y permitiéndole a le madre, que va delante, mantener el control de los pequeños. A los 8 o 9 días abrirán por primera vez los ojos, al tiempo que completan el pelaje. Los pequeños continuarán mamando hasta los 20 o 22 días.

Durante este periodo las musarañas son agresivas con los intrusos, y los machos se encargan de defender a las crías. Las jóvenes musarañas serán capaces de
reproducirse al poco tiempo de abandonar el nido, a excepción de las nacidas en la última camada, que deberán esperar al inicio del siguiente periodo de reproducción.

CURIOSIDADES

Es un animal solitario y territorial, aspecto que se ve reducido durante el invierno, en el que pueden formar nidos comunales. Por el contrario, durante la época de reproducción, y sobre todo las hembras, se vuelven mucho más territoriales, y sólo admiten 1 macho en su territorio, cubriendo cada macho varias hembras.
Esta especie no esta sujeta a ningún periodo de hibernación, permaneciendo activa durante todo el año, y desarrollando su actividad tanto de día como de noche, con un periodo máximo de movimiento durante el atardecer y el amanecer.
Su vista es pobre, debiendo desempeñar el sentido del tacto la misión de exploración y detección de alimento.
Entre los animales que se alimentan de la Musaraña Común nos encontramos con las aves de presa, especialmente las nocturnas, el zorro, el gato montés, la gineta, la garduña, el turón, la comadreja, etc.
La Musaraña común emite una especie de chillidos ultrasónicos que son audibles.
Las huellas son difíciles de observar. Los 5 dedos de las cuatro patas dejan huellas separadas, y la cola deja un rastro sinuoso.
Los excrementos son muy oscuros o negros, alargados con los extremos afilados y miden entre 2 y 4 mm de largo por 1 ó 2 de grueso. Suelen estar compuestos por restos de insectos y son depositados sobre piedras o entre la vegetación.

RATA DE AGUA Arvicola sapidus


CARACTERÍSTICAS

Esta especie es morfológicamente muy similar a la Rata de Agua Septentrional (Arvicola terrestris); la diferencia con la Rata de Agua Septentrional radica en que la coloración de la especie que nos ocupa es más rojiza, el tamaño más grande y la cola más larga.
Su cráneo es grande y muy robusto. Los pies traseros poseen pelo en las plantas. La cola mide por lo menos la longitud de la cabeza y el cuerpo juntas .
El pelaje que presentan es espeso. La coloración varía bastante según las zonas. La espalda suele ser pardo oscuro, y la zona del vientre del mismo color con tonalidad más grisácea.
Esta especie crece durante toda la vida por lo que la longitud de la cabeza junto con al cuerpo varía desde los 17 a los 22 cm., y la cola entre 10 y 14,5 centímetros. Su peso oscila entre 15 y 30 gramos.
Las hembras poseen normalmente un total de 6 mamas, distribuidas en 2 pectorales y 4 inguinales.
Posee un total de 32 piezas dentales, observándose tanto en la mandíbula superior como en la inferior, 2 incisivos y 6 muelas, careciendo totalmente de colmillos y premolares.

HÁBITAT

Esta especie permanece vinculada a los medios acuáticos permanentes, con vegetación no leñosa en las orillas, así como en suelos frescos y húmedos. Un ejemplo de su hábitat serían los ríos, lagos, lagunas, etc.
Su nido es esférico y suele estar ubicado bajo tierra o entre la vegetación. La madriguera es excavada por este animal, consta de varias entradas tanto dentro como fuera del agua. Éste es fácilmente detectable gracias a los montículos de tierra que acumula junto a la entrada, los cuales son similares a los de los topos. Las galerías excavadas pueden llegar a medir 25 cm. de longitud y constan de cámaras de cría, cámaras de despensa, etc.
Existen 2 subespecies: la A. sapidus sapidus y la A. sapidus tenebricus.
Ocupa casi toda la península Ibérica, con excepción de las zonas del norte Cataluña y el Sur Este peninsular. No se encuentra presente ni en las Islas Baleares ni en las Canarias.

ALIMENTACIÓN

Es un animal herbívoro que se alimenta de tallos y raíces de plantas acuáticas, cortezas de árboles, sembrados, etc. Ocasionalmente consume materia animal.

CURIOSIDADES

Se trata de animales sociales que viven en madrigueras, pudiendo durante las nevadas construir el nido bajo la nieve y hacer túneles bajo ésta.
Permanece activa durante las 24 horas del día, observándose mayor actividad durante el día.
Sabe nadar y bucear perfectamente, excavando sus propias galerías que miden entre 86 y 8 cm. de diámetro.
Normalmente se desplaza andando. Aunque no está sujeta a ningún periodo de hibernación, suele acumular comida. La Rata de Agua Meridional, no suele superar en libertad los 2 inviernos de vida.
Una curiosidad sobre este animal es que si por ejemplo en la zona abundaran los animales diurnos, se volvería más nocturna; si por el contrario la fauna de la zona es nocturna, la Rata de Agua Meridional, se volvería más diurna.
Los excrementos son oscuros y de forma cilíndrica; miden de 0,7 a 1,1 cm. de largo por entre 0,3 y 0,4 cm. de grosor.
Las huellas constan de 5 dedos en las patas delanteras y 4 en las traseras, quedando en suelo blando marcadas las uñas correspondientes. Estas huellas son fácilmente encontradas a orillas de las zonas húmedas en donde habita. La delantera mide 1,5 cm. y la trasera unos 2,5 cm. Son muy similares a las huellas dejadas por los ratones, diferenciándose de estos en que falta la 6ª almohadilla de la pata trasera.
A menudo deja huellas en los árboles de su hábitat, ya que los descorteza a una altura de unos 20 cm. de la base del árbol.
Los principales enemigos de este animal son el turón, la nutria, el visón, la lechuza, etc.

RATON DE CAMPO Apodemus sylvaticus


CARACTERÍSTICAS

Roedor de pequeño tamaño que no supera los treinta y cinco gramos de peso. De hábitos esencialmente nocturnos, cuenta con una cabeza voluminosa, dotada con unos ojos negros, grandes y prominentes que sobresalen del rostro, adaptados a la visión de noche, en la que se desenvuelve con soltura. Tiene unas orejas bien desarrolladas, con los pabellones auriculares erectos, su cola es larga y poblada de pelo corto. Su coloración es marrón, con tonalidades rojizas, de aquí que popularmente sea conocido como ratón colorado, aun cuando su coloración se torna más clara, casi blanquecina, en la zona del pecho y parte inferior del vientre del animal.

HÁBITAT

El ratón de campo, de modo general, es el mamífero más abúndate en nuestros campos y montes, donde podemos localizarlo desde el nivel del mar a la alta montaña, donde se vuelve raro aunque no está ausente, si bien alcanza su óptimo en ambientes rurales con cultivos de cereales donde alimentarse. Las plantaciones de almendros y olivares es otro lugar querencioso para el ratón de campo, por la abundancia de alimento que ahí puede encontrar .

Con un poco de práctica y unos conocimientos elementales podemos diferenciar el ratón de campo de otras especies de ratones con las que comparte territorio y puede confundirse aparentemente.

ALIMENTACIÓN

El ratón de campo consume fundamentalmente frutos, piñas y semillas, aunque sin rechazar brotes y tallos jóvenes, a los que puede ocasionar importantes daños, como también los causa a los cultivos, particularmente de cereales, por lo que siempre ha sido considerado por el hombre como una plaga, aun cuando su papel en el ecosistema natural es incuestionable, al formar parte de la cadena trófica de un amplio número de especies.

Muy curiosos son los hábitos de acopio y almacenamiento de alimentos que efectúa esta especie, pudiendo acumular centenares de semillas cuando las condiciones le son idóneas. Reproducimos la imagen de una vieja higuera en la que la fractura de una rama dejó al descubierto una importante acumulación de almendras, efectuada por el ratón de campo posiblemente a lo largo de varias generaciones:

Un detalle muy característico para detectar la presencia de frutos secos consumidos por el ratón de campo como almendras, avellanas o nueces, y no por otro roedor, es la presencia de una corona junto a un corte muy redondeado y perfecto. Esta corona es debida a que el ratón de campo al consumir los frutos secos los agarra con las manos y los apoya sobre el pecho, de modo que tras perforar la cáscara del fruto introduce los incisivos inferiores que atacan la cáscara de adentro hacia fuera y como el ratón hace girar el fruto mientras que lo va royendo, los incisivos superiores dejan marcado un surco redondeado muy característico, exterior al borde superior del agujero de la cáscara. No obstante debe de tenerse presente que esta marca, por los efectos de la meteorología y exposición al sol, por ejemplo, desaparece a los pocos meses, por lo que solo es apreciable con detalle en los frutos consumidos recientemente. Cuando la perforación del ratón ha alcanzado tamaño suficiente para acceder al interior de la semilla, sirviéndose de los incisivos inferiores y las manos la termina de extraer completamente
En la etología del ratón de campo se ha descrito una conducta similar a la comentada con el conejo y la liebre, cual es la de que los ratones, cuando son jóvenes, se comen las heces de la madre, ricas en vitamina B12 y microflora, necesarias para la digestión de la celulosa, lo que se conoce como coprofagia, con lo que se desarrolla una falsa rumia, favoreciendo de este modo la digestión de los alimentos vegetales.

REPRODUCCIÓN

Son precoces muy pronto: con 12 gramos las hembras y con 15 gramos el macho ya son activos sexualmente.
Para su reproducción el ratón de campo construye madrigueras, galerías y nidos, que cuentan con una o dos entradas, de 3 ó 4 cms. de diámetro que desembocan en una cámara nido, cubierta de hierba seca y hojas, que puede emplazarse a más de un metro de profundidad. También puede adaptarse a vivir en las oquedades de los árboles viejos o entre sus raíces
El ratón de campo puede estar sexualmente activo todo el año, particularmente en los lugares de clima benigno como las Baleares o el Valle del Guadalquivir, si bien y con carácter general para el territorio peninsular se suelen establecer dos periodos de cría coincidentes con la primavera y otoño, respectivamente.
La gestación dura de 25 a 26 días.
El parto, suele coincidir con la primavera y otoño. Los deposita la hembra en el interior de la madriguera o nido, donde acondiciona un lecho con hojas secas y hierba, naciendo desnudos, con los ojos cerrados, sin capacidad auditiva y pesando tan solo 1 ó gramos.
Maman mientras no tienen incisivos, lo que ocurre al 13º día.

CURIOSIDADES

El ratón de campo se ha utilizado en el campo de la ecotoxicología como bioindicador de la contaminación ambiental, al haberse manifestado la especie con una especial capacidad para determinar la salud ambiental de un lugar, de modo que se ha determinado que donde está presente el ratón de campo es un ecosistema que carece de contaminación y goza de buena salud natural (Unidad de Toxicología Experimental y Ecotoxicología del Parque Científico de Barcelona, National Geographic España, octubre-2004).

Los daños en cultivos agrícolas, o en repoblaciones forestales, parecen que son las principales problemáticas que se achacan al ratón de campo. Algunos cazadores que facilitan comida a las perdices en los cotos de caza se quejan de que los ratones de campo se comen el trigo que ponen para las perdices.

LIRON CARETO Elyomis quercinus


CARACTERÍSTICAS

Al lirón careto podemos definirlo como “un dormilón con antifaz” y es que este pequeño y simpático roedor se caracteriza por la presencia de una franja de pelo de color negro en la zona ocular que, a modo de careta, le cubre parte del rostro y se prolonga tras las orejas, detalle cromático del que toma su nombre común (careto). Si a lo anterior le unimos que este animal entra en largos y profundos sueños de donde también se adopta la conocida expresión del lenguaje popular “dormir más que un lirón”, habremos sintetizado en una pocas palabras al lirón careto. Pero este glírido también se caracteriza anatómica por otra serie de detalles, que no pueden pasarnos desapercibidos, como es su larga cola o rabo, poblada de pelos en forma de pincel en la punta, de la que puede desprenderse en caso de peligro al ser aprendida por algún depredador (anatomía caudal) poniéndose a salvo de este modo. También cuenta el lirón careto con unas orejas bien desarrolladas en las que destaca el pabellón auricular, dispuestas a captar el menor ruido. El lirón careto igualmente está provisto de unas uñas fuertes y potentes, que denotan sus cualidades trepadoras para subir a los árboles, arbustos y muros de piedra en busca de alimento o refugio, donde pasa gran parte de su vida.

HÁBITAT

El lirón careto tiene hábitos principalmente nocturnos, aunque también puede ser visto durante el día y aunque podemos localizarlo en una gran amplitud de hábitats, al tratarse de una especie generalista, que habita en casi toda Europa, siente predilección por los Quercus de donde proviene su nombre científico (quercinus). No ocupa la alta montaña.

Es fundamental en la etología del lirón careto la presencia de árboles añosos, de roquedos, muros de piedra o viejas construcciones en las que refugiarse, para pasar el letargo propio de la especie, acondicionando un nido con pelo, plumas, líquenes secos, hojas y musgo donde se acomoda en una clásica formando una bola para hibernar. Cuando no encuentra refugios naturales puede ocupar nidos de aves o cajas anidaderas, en las que se acomoda con total descaro ¡curioso okupa!.

ALIMENTACIÓN

Si bien el lirón careto come fundamentalmente alimentos de carácter animal como caracoles, insectos, arácnidos, además de anfibios o incluso otros roedores, poyuelos y huevos, en el otoño y en la época previa a la hibernación se dispara el consumo de frutos otoñales del bosque, fundamentalmente bellotas y hayucos, con cuyo aporte calórico aumenta considerablemente sus reservas energéticas.

REPRODUCCIÓN

Alcanzan la madurez sexual entre los 3 y 6 meses, normalmente a los cinco, momento a partir del cual se produce la disgregación juvenil.

Celo: Como en la mayor parte de los roedores, está condicionado por la disponibilidad de alimento aunque también en el caso de este especie por la climatología. Lo normal es que para una sola vez al año en la época estival, aun cuando en climas favorables puede tener 2 o incluso 3 camadas si las condiciones climatológicas lo permiten.

Gestación. La gestación dura de 22 a 28 días, normalmente 25.

Época de parto. El parto suele coincidir con la época estival o final de la primavera.

Parto: De 2 a 8 crías, normalmente 4 ó 5, que pesan al nacer unos 15 ó 20 gramos y que nacen con los ojos cerrados y sin capacidad auditiva. Abre los ojos entre los 15 y 21 días. Cuando nacen los lirones presentan un pelaje grisáceo que va oscureciéndose con la edad del animal, aun cuando el antifaz es apreciable desde los primeros días.

Duración de la lactancia: Las crías son amamantadas durante un período que va de los 40 a los 45 días.

CURIOSIDADES

El lirón careto durante la hibernación entra en un profundo sueño, más prolongado en las zonas más frías, periodo en el que baja la temperatura corporal para adaptarla al entorno, reduce la respiración y los latidos del corazón considerablemente, con el objeto de reducir al mínimo el consumo energético, reducido al imprescindible para mantener la funcionalidad de sus órganos vitales. A lo largo de este período va consumiendo lentamente sus reservas pudiendo perder hasta el 50 % de su peso. En lugares de clima estival muy caluroso y con escasez de alimento por la sequía veraniega también puede entrar en un letargo de menos intensidad que la hibernación conocido como estivación.

Principales problemáticas. Se ha constatado en los últimos tiempos, de modo general, que los lirones caretos eran más abundantes hace unos años que ahora, sin que estén claras las causas de este descenso poblacional. Se ha considerado en algunas hipótesis que se han visto afectados en su capacidad reproductiva por insecticidas y pesticidas que han disminuido la capacidad de fecundación de la especie, muy sensible a los mismos por el papel que desempeña en la cadena trófica, al alimentarse de insectos, caracoles o arácnidos que sufren directamente los efectos de los fitosanitarios.

Si bien el lirón careto no suele presentar incidencias sobre otros animales, puede motivar el desplazamiento de poblaciones de pájaros que se ven molestados en sus nidos por el lirón careto.

Huellas. El poco peso del lirón careto hace difícil que se marque sus huellas, si bien es posible encontrar las mismas en sustratos idóneos como lodo, arcilla o barro, destacando la forma longitudinal del lóbulo posterior del talón. Aunque puede prestarse a confusión con la huella de algunas aves (pájaros), en el que la garra posterior puede confundirse con el lóbulo alargado del talón de las patas posteriores del lirón careto. Si bien una y otra se diferencian en que las aves dejan marcado los 3 dedos en la parte anterior de la huella con una abertura de unos 45º, mientras que en el lirón careto se marcan los 4 dedos agrupados y en ocasiones también la cola o rabo, cuando se trata de sustrato muy blando como lodo o barro blando.

Excrementos: De color marrón o negruzco, con una longitud de unos 0,8 a 1,5 cms., en el que uno de los extremos suele terminar en punta, con pequeños retorcimientos y característica presencia de quitina, la cual no es apreciable cuando solo ha comido frutos secos.

Otros rastros: Los frutos secos como almendras o nueces y los restos de frutos del género Quercus (encinas, hayas y robles) son el mejor rastro para detectar la presencia de la especie, aun cuando puede confundirse con los consumidos por otros roedores, por lo que es necesario un atento examen de la cáscara. Así en las almendras es característico de esta especie el fuerte descortezamiento; en las bellotas suele comérselas mayoritariamente por los lados; mientras que otros frutos otoñales como los escaramujos (frutos del rosal silvestre) suele consumirlos o mordisquearlos parcialmente por el lateral. Por lo que será la forma de atacar el alimento lo que nos delate la impronta genética del animal que ha dejado los restos de comida.

En el examen de las egagrópilas (bolos de desecho alimenticio que regurgitan las aves con los restos indigeribles de lo que han comido, como pelos, plumas, piel, huesos) también puede detectarse la presencia en la misma de resto de lirón careto localizando la mandíbula inferior, la que presenta una característica perforación, tal y como ilustra la imagen, al ser el único roedor que posee esta detalle anatómico.